• La nueva investigación encontró que el 62% de las aguas residuales son manejadas de manera insegura en 15 ciudades del sur global
  • Los residuos que no se tratan o eliminan adecuadamente afectan a ciudades enteras, ya que pueden propagarse a través del agua, los alimentos y moscas contaminadas
  • El estudio forma parte del  World Resources Report: Towards a More Equal City, una serie de investigaciones que examinan si el acceso equitativo a los servicios e infraestructuras urbanas básicas conduce a ciudades más productivas y sostenibles

Washington, D.C, 18 de diciembre 2019.- El número de residentes urbanos que carecen de servicios sanitarios gestionados de forma segura ha aumentado de mil 900 millones en el año 2000 a 2.300 millones en 2015, lo que supone un costo global de 223 mil millones de dólares al año en cuanto a salud, pérdida de productividad y salarios. Según una nueva investigación del Centro Ross para Ciudades Sustentables del Instituto de Recursos Mundiales (WRI, por sus siglas en inglés), el problema es aún más grave de lo que la mayoría cree, especialmente para los hogares de bajos ingresos en áreas urbanas densas cuyas necesidades a menudo han sido pasadas por alto.

La más reciente investigación del Centro Ross de WRI, Untreated and Unsafe: Solving the Urban Sanitation Crisis in the Global South, encontró que, en promedio, el 62 por ciento de las aguas residuales y los residuos humanos son manejados de manera insegura en varios puntos de la cadena de servicios de saneamiento a través de 15 ciudades en el sur global. El acceso al saneamiento es generalmente más bajo en Asia meridional y en África subsahariana. En tres ciudades -Colombo, Sri Lanka; Caracas, Venezuela; y Karachi, Pakistán- los investigadores descubrieron que el cero por ciento de los residuos humanos se gestiona de forma segura. En el caso específico de los lodos por desechos humanos, cinco de las 15 ciudades no tenían ningún reglamento de gestión en vigor.

Los residuos que no se contienen, transportan, tratan, reutilizan o eliminan adecuadamente afectan a toda la ciudad, ya que la contaminación puede propagarse a través del agua, los alimentos y las moscas contaminadas. En las 15 ciudades estudiadas, los hogares que no podían permitirse el lujo de conectarse a un sistema de alcantarillado o que no disponían de un sistema de alcantarillado, construyeron soluciones de saneamiento in situ (fosas sépticas y letrinas de pozo), o recurrieron a métodos inseguros. Muchos utilizaron drenajes autoabastecidos para verter los residuos humanos no tratados o parcialmente tratados en los desagües pluviales y vías fluviales, o los residentes recurrieron a la defecación al aire libre. Las ciudades incluyen Bangalore, India; Caracas, Venezuela; Cochabamba, Bolivia; Colombo, Sri Lanka; Dhaka, Bangladesh; Kampala, Uganda; Karachi, Pakistan; Lagos, Nigeria; Maputo, Mozambique; Mumbai, India; Mzuzu, Malawi; Nairobi, Kenia; Rio de Janeiro, Brasil; Santiago de Cali, Colombia; y São Paulo, Brasil.

"Ninguna ciudad puede ser saludable, o a largo plazo exitosa, sin proveer a sus residentes con acceso universal a servicios de saneamiento seguros y asequibles", dijo David Satterthwaite, autor principal y miembro distinguido del Instituto Internacional para el Medio Ambiente y el Desarrollo.

"El tema ha recibido muy poca atención de la mayoría de los gobiernos y agencias de ayuda, especialmente para los desatendidos urbanos".

El análisis de WRI también encontró que, contrariamente a la percepción popular, las alternativas in situ para el acceso a las alcantarillas -fosas sépticas y letrinas de pozo- no son necesariamente menos costosas para los hogares que las conexiones de las alcantarillas, especialmente cuando se considera la cadena completa de servicios. Por ejemplo, las letrinas requieren de un vaciado regular, un servicio inasequible para los hogares de bajos ingresos. Para un asentamiento informal en Lagos, los investigadores encontraron que construir una letrina ventilada cuesta más del 600 por ciento del ingreso mensual promedio de un hogar.

Al igual que con el acceso al agua, los indicadores globales comúnmente utilizados han subestimado la falta de acceso al saneamiento en áreas urbanas densas, particularmente por el asunto de la asequibilidad para los hogares.

Los métodos considerados de "saneamiento mejorado", como las letrinas de pozo privadas, no solo son menos rentables para los hogares de lo que se pensaba originalmente, sino que no son apropiados para los asentamientos densamente poblados. En Dhaka, Bangladesh, la ciudad más densamente poblada de la muestra hecha por WRI, el 75 por ciento de los hogares dependen de fosas sépticas, muchas de las cuales tienen fugas y no están construidas de acuerdo con las normas de seguridad.

Aunque los indicadores no fueron diseñados específicamente para áreas urbanas, tampoco hay muchas otras alternativas. Esto ha dado lugar a un énfasis excesivo en las soluciones de saneamiento que no siempre se ajustan a las ciudades del sur global, incluidas las soluciones de alta tecnología basadas en el mercado en las que muchos inversores han depositado sus esperanzas.

La investigación del WRI encontró que, para para resolver la crisis de saneamiento en las áreas urbanas densas, la inversión y la regulación del sector público son necesarias.

"Durante demasiado tiempo, los responsables de las políticas urbanas y los gobiernos han ignorado el problema de los residuos humanos no tratados en las ciudades, y han pretendido que, porque eran manejados por los hogares y fuera de la vista, el problema ya estaba resuelto”, dijo Victoria A. Beard, coautora, investigadora asociada del Centro Ross de Ciudades Sostenibles de WRI y profesora de planificación urbana y regional de la Universidad de Cornell.

"Pero el hecho es que esto presenta un enorme riesgo para la salud pública, así como un lastre para la economía".

¿Qué pueden hacer las ciudades? La evidencia sugiere cuatro acciones específicas que se pueden tomar en ciudades emergentes y en dificultades ubicadas en

América Latina, Asia y África subsahariana para mejorar el acceso seguro al saneamiento para las personas desfavorecidas en las urbes:

1) Ampliar la red de alcantarillado a los sanitarios domésticos, comunitarios y públicos. Los sistemas de alcantarillado requieren de grandes inversiones de capital y suministros diarios de agua para funcionar adecuadamente, pero reducen el costo de los servicios de saneamiento desde las perspectivas de las personas y los hogares.

2) En ausencia de sistemas de alcantarillado, se debe apoyar y regular las opciones de saneamiento en el sitio, tales como las fosas sépticas y las letrinas de pozo. Las ciudades deben ver estas opciones como enfoques a corto y mediano plazo, para proporcionar el saneamiento mientras se sientan las bases para soluciones fuera del sitio como las conexiones de alcantarillado.

3) Apoyar en toda la ciudad con el mejoramiento participativo de los asentamientos informales que abordan la necesidad de servicios de saneamiento. El gobierno de Mumbai, por ejemplo, apoyó el trabajo de Mahila Milan (la federación de grupos de ahorro de mujeres de barrios marginales) para establecer la gestión comunitaria de los baños públicos, proporcionando instalaciones mejoradas a medio millón de residentes.

4) Hacer que los servicios de saneamiento sean más asequibles para los hogares de bajos ingresos. Esto incluye el subsidio del costo de una conexión de alcantarillado a los inodoros domésticos, comunales y públicos, y el subsidio de los costos de la gestión del saneamiento seguro en el sitio.

5) Para que estas acciones se hagan realidad, las ciudades y las autoridades de saneamiento necesitan datos de saneamiento desagregados y accesibles para impulsar e informar la acción. También necesitan mejorar la capacidad reguladora y financiera y establecer incentivos para fomentar y hacer cumplir la contención, el transporte, el tratamiento y la reutilización o eliminación segura de los residuos humanos.

"La falta generalizada de acceso a un saneamiento urbano seguro es un riesgo para la salud pública, el medio ambiente y la economía mundial, que nos cuesta 223 mil millones de dólares anuales y seguirá creciendo. Las soluciones integrales se estiman en menos de 300 mil millones de dólares. Este es un problema que se puede resolver, pero necesitamos actuar ahora", dijo Ani Dasgupta, director global del Centro Ross de Ciudades Sostenibles de WRI.

El documento de trabajo forma parte del Informe sobre el  World Resources Report: Towards a More Equal City, una serie de documentos de investigación y estudios de caso que examinan si el hecho de proporcionar un acceso equitativo a los servicios e infraestructuras urbanas básicas, como la vivienda, el agua, la energía y el transporte, conduce a ciudades más productivas económicamente y más sostenibles desde el punto de vista medioambiental.

Para más información, visita wri-citiesforall/publication/untreatedand-unsafe.