A nivel mundial, las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) han aumentado un 50% entre 1990 y 2018.

¿De dónde provienen estas emisiones, y quiénes son los responsables? La plataforma Climate Watch de WRI ofrece datos y gráficas de emisiones sobre todos los países, sectores y gases. Esto es lo que sabemos sobre los sectores y países que ocasionan un incremento en las emisiones de gases de efecto invernadero a nivel mundial:

El sector de la energía es el que produce la mayor cantidad de emisiones de GEI

El consumo de energía es, por mucho, la mayor fuente de emisiones antropogénicas de gases de efecto invernadero. Este sector es responsable de un 76% (37.2 GtCO2eq) de las emisiones globales, e incluye los subsectores de transporte, generación de calor y electricidad, edificaciones, la industria manufacturera y de la construcción, las emisiones fugitivas y la quema de otros combustibles.

Además de éste, los sectores con más emisiones son la agricultura, incluyendo a la ganadería (5.8 GtCO2eq, o 12%); los procesos industriales de productos químicos, del cemento y de otros (2.9 GtCO2eq, o 5.9%); los residuos, incluyendo vertederos y aguas residuales (1.6 GtCO2eq, o 3.3%); y el de uso de suelo, cambio de uso de suelo y silvicultura (USCUSS), así como la deforestación (1.4 GtCO2eq, o 2.8%).

Dentro del sector energía, la generación de calor y electricidad es el subsector responsable de la mayor parte de las emisiones (15.6 GtCO2eq en 2018, o el 31.9% de las emisiones totales de gases de efecto invernadero), seguido por el transporte (6.9 GtCO2eq en 2018, o el 14.2% de las emisiones totales) y la industria manufacturera y de la construcción (6.2 GtCO2eq, o 12.6% de las emisiones totales).

Emisiones a nivel mundial de gases de efecto invernadero en 2018 (Sector | Uso final | Gas)

Total: 48.9 GtCO2e

Actualmente, las edificaciones y el uso del automóvil son los principales contribuyentes a las emisiones relacionadas con el consumo de energía

La columna central del gráfico anterior muestra las emisiones por uso final de la energía eléctrica, e ilustra las actividades específicas de las que provienen las emisiones. Las actividades que generan la mayor cantidad de emisiones son el transporte por carretera (12.5% de las emisiones totales), los edificios residenciales (11.4% de las emisiones totales) y los edificios comerciales (6.7% de las emisiones totales). Las emisiones de estas actividades incluyen tanto las directas por la quema de combustibles fósiles, como las emisiones indirectas por el consumo de electricidad.

Fuera del sector energía, las principales emisiones son de la ganadería y el estiércol (5.9%), otras industrias (4.5%) y los suelos agrícolas (4.2%). La categoría "otras industrias" abarca todas las actividades que no se incluyen directamente en las demás categorías. Cubre una amplia gama de actividades, como los minerales no metálicos, la construcción, minería, textiles y cuero, la madera y productos derivados de la madera, equipos de transporte, entre otros.

La industria y el transporte son las fuentes de gases de efecto invernadero que han crecido más rápido

Desde 1990, tres sectores destacan como las fuentes de gases de efecto invernadero de más rápido crecimiento: los procesos industriales crecieron un 187%; el transporte (un subsector de la energía), un 79%, y la industria de la manufactura y de la construcción (también un subsector de la energía), un 56%. El crecimiento de las emisiones industriales se debe no sólo a las emisiones de CO2, sino también al aumento en el uso de refrigeración y aire acondicionado. Estas actividades producen hidrofluorocarbonos (HFC), que son potentes gases de efecto invernadero. Por otro lado, el aumento de los viajes en automóvil es la razón principal por la que las emisiones del transporte van en aumento.

En comparación, las emisiones del subsector con más emisiones dentro del sector de la energía, la generación de electricidad y calor, aumentaron un 78% entre 1990 y 2013, pero luego disminuyeron 2.4% entre 2013 y 2016. La disminución se debió a varios factores, incluido un cambio de carbón por gas natural y un mayor uso de energías renovables. Sin embargo, los últimos datos de emisiones de carbono sugieren que las emisiones de este subsector volvieron a aumentar en 2017 y 2018 en un 1.3% y un 2% respectivamente, manteniendo un aumento marginal del 0.06% en 2019.

Diez Países Producen Más del 68% de las Emisiones Mundiales de Gases de Efecto Invernadero

Un pequeño número de países contribuye con el mayor porcentaje de las emisiones de gases de efecto invernadero, los 10 países que más emisiones generan representan más de dos tercios de las emisiones anuales de gases de efecto invernadero a nivel mundial. La mayoría de estos países tienen grandes poblaciones y economías, y representan más del 50% de la población mundial y el 75% del PIB mundial. China es el mayor emisor, con el 26.1% de las emisiones globales de gases de efecto invernadero, seguida de Estados Unidos, con el 12.67%, la Unión Europea, con el 7.52%, e India, con el 7.08%*.

La mayoría de estos países tienen emisiones per cápita más altas que el promedio mundial (alrededor de 6.45 tCO2eq per cápita). Entre los 10 principales emisores de gases de efecto invernadero, Canadá y Estados Unidos tienen las emisiones de gases de efecto invernadero per cápita más altas con 20.6 tCO2eq y 17.74 tCO2eq per cápita, respectivamente, mientras que India tiene las más bajas con 2.47 tCO2eq. Las emisiones per cápita de China (8.4 tCO2eq) siguen en aumento, y superan las de la Unión Europea (7.46 tCO2eq).

Países como Qatar y Australia, aunque no se encuentran entre los 10 principales emisores, tienen las emisiones per cápita más altas con 35.89 tCO2eq y 24.79 tCO2eq, respectivamente.

México ocupa el decimosegundo lugar entre los países que producen más emisiones de gases de efecto invernadero a nivel global

Las emisiones de gases de efecto invernadero de México (647 MtCO2eq) representan el 1.42% de las emisiones a nivel mundial, y es el segundo país de Latinoamérica con una mayor contribución, sólo superado por Brasil (séptimo lugar), y sus emisiones per cápita son de 5.39 tCO2eq.

Los subsectores que más emisiones generan en México son el transporte y la generación de electricidad, con 193.2 MtCO2eq (28%) y 156.6 MtCO2eq (23%), respectivamente. Les siguen la agricultura (96.8 MtCO2eq, 14%), la industria manufacturera y de la construcción (66.7 MtCO2eq, 10%), residuos (46.8 MtCO2eq, 7%), procesos industriales (40.5 MtCO2eq, 6%), emisiones fugitivas (31.7 MtCO2eq, 5%), quema de otros combustibles (26 MtCO2eq, 4%) y edificaciones (21.6 MtCO2eq, 3%).

El dióxido de carbono constituye la mayoría de las emisiones de gases de efecto invernadero, pero no todas

El dióxido de carbono (CO2) representa el 74% de las emisiones de gases de efecto invernadero. La mayoría de las emisiones de CO2 (93%) provienen del uso de combustibles fósiles, especialmente para la generación de electricidad y calor, transporte, y manufactura y consumo. El uso de suelo, el cambio de uso y la silvicultura es otro sector que contribuye (3.3%) a las emisiones de CO2 causadas por el hombre, principalmente debido a la deforestación.

El metano (CH4) y el óxido nitroso (N2O) representan el 17.2% y el 6.3% de las emisiones totales de gases de efecto invernadero, respectivamente, provenientes principalmente de la agricultura, el tratamiento de residuos y la quema de gas o “flaring”. Los gases fluorados de los procesos industriales (que comprenden los HFC, perfluorocarbonos (PFC), hexafluoruro de azufre (SF6) y trifluoruro de nitrógeno (NF3)) representan el 2.3% de las emisiones globales. Estos gases son mucho más potentes que el CO2 en términos de su potencial de calentamiento y, a menudo, representan oportunidades de mitigación que se pasan por alto.

Las emisiones de gases de efecto invernadero deben reducirse rápidamente para evitar la crisis climática

El mundo ya se enfrenta a las consecuencias del cambio climático. Para evitar impactos mucho más peligrosos y costosos, los niveles actuales de emisiones de gases de efecto invernadero deben reducirse a la mitad para 2030 y llegar a cero emisiones netas a mediados de siglo.

Todos los países, en particular las principales economías, deben intensificar su ambición climática y presentar nuevos o actualizados planes climáticos nacionales reforzados. A nivel mundial, las emisiones de gases de efecto invernadero en 2030 deben ser un 55% más bajas que en lo señalado en la primera ronda de Contribuciones Determinadas a nivel Nacional (NDC, por sus siglas en inglés) para limitar el calentamiento a 1.5 grados C y prevenir los peores impactos del cambio climático. Las mayores fuentes de emisiones, como el sector energético, son buenos lugares para comenzar.

Por ejemplo, la NDC de México, presentada en 2020, establece como meta no condicionada reducir el 22% de las emisiones de gases de efecto invernadero. Esta ambición es considerada como insuficiente e inconsistente con la meta del Acuerdo de Paris de mantener el incremento de la temperatura global muy por debajo de los 2° C por el Climate Action Tracker.

Pero afrontar plenamente la crisis climática requerirá reducciones profundas en todos los sectores, grandes y pequeños. Por ejemplo, el informe sobre el Estado de la Acción Climática señala que con la finalidad de que el mundo se encamine hacia los recortes de emisiones requeridos para 2030, debemos eliminar el carbón en la generación de electricidad cinco veces más rápido, acelerar el aumento de la cobertura arbórea anual cinco veces más rápido, y acelerar el aumento de la proporción de combustibles bajos en carbono ocho veces más rápido. Cambiar a energías renovables, electrificar el sector del transporte, introducir prácticas agrícolas más sostenibles, frenar la deforestación y degradación forestal, y producir menos desechos son algunos de los pasos críticos para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y encaminar al mundo hacia un futuro más seguro.

*Todos los valores están basados en las emisiones totales de GEI sin considerar el sector USCUSS. La Unión Europea (27) se considera un país en este gráfico. Tenga en cuenta que las emisiones del sector uso de suelo, cambio de uso de suelo y silvicultura (USCUSS) no se asignan a los países en este gráfico, ya que los valores pueden ser negativos. El combustible búnker, usado en la aviación internacional y el transporte marítimo, no se incluye en los resultados totales de los países. Otros territorios incluyen regiones no cubiertas por los datos de Climate Watch. Consulte Climate Watch para conocer las emisiones por uso de suelo, el cambio de uso de suelo, silvicultura y el uso de combustible búnker.