El CAIT, el Protocolo GEI y el EPS ayudarían al País a encontrar mejores estrategias, destacan las autoras

La concentración promedio de dióxido de carbono (CO2) en la atmósfera alcanzó las 415 partes por millón (ppm) en mayo de 2019, el nivel más alto registrado en la Historia. Aunque los niveles de CO2 han fluctuado durante cientos de miles de años, la tasa de cambio actual no tiene precedentes en al menos 800 mil años.

El CO2 es el principal gas causante del cambio climático y, si bien es inodoro y transparente, incluso casi imperceptible, una gran concentración de éste en la atmósfera trae consigo graves consecuencias.

Desarrollar estrategias de mitigación y prevención ha sido posible gracias a los esfuerzos de medición y a la generación de herramientas que permiten monitorear las concentraciones atmosféricas de CO2 y otros gases. Un ejemplo es el Observatorio de Mauna Loa en Hawái, del Instituto Scripps de Oceanografía, el cual, desde su fundación en 1958, mide constantemente los niveles de CO2 y difunde alertas sobre la crisis ambiental y sanitaria que podría provocarse por concentraciones de esta magnitud.

A nivel mundial, México también ha sido uno de los principales impulsores de la generación y transparencia de la información sobre cambio climático, y además de ser reconocido internacionalmente por su liderazgo en las negociaciones climáticas, la adopción de compromisos y la elaboración de leyes nacionales, el País ha logrado avances en la generación y disponibilidad de información pública y pertinente sobre su situación ante el cambio climático, las acciones e instrumentos de planeación para enfrentarlo y las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) por sector y periodo, entre otros. Esta información ha sido esencial para diseñar mejores programas y políticas, y para establecer acciones de mitigación y adaptación ante el cambio climático.

De conformidad con sus compromisos internacionales y la Ley General de Cambio Climático, México ha presentado ante la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC) seis Comunicaciones Nacionales y dos Informes Bienales. La Sexta Comunicación Nacional, publicada en 2018, ofrece una visión general sobre los efectos y las proyecciones del cambio climático en México, así como sobre las acciones de adaptación y reducción de emisiones de GEI que se llevaron a cabo de 1990 a 2015.

Esta comunicación, que cumple con todos los requisitos y recomendaciones del Panel Intergubernamental de Expertos sobre Cambio Climático (IPCC), también incluye la actualización a 2015 del Inventario Nacional de Emisiones de Gases y Compuestos de Efecto Invernadero (INEGyCEI), con datos de emisiones de los seis gases de efecto invernadero incluidos en la CMNUCC. Con base en el inventario, se han desarrollado políticas nacionales de cambio climático, como el Programa Especial de Cambio Climático (PECC) y la Contribución Determinada a Nivel Nacional (NDC, por sus siglas en inglés).

El inventario muestra que las emisiones nacionales incrementaron en 57 por ciento entre 1993 y 2015. Sin embargo, a pesar de que las emisiones aumentaron, la tasa de crecimiento disminuyó del 12.9 por ciento entre 2005 y 2010, al 5 por ciento entre 2010 y 2015. El sector que más emite GEI es el de energía, con el 71 por ciento del total de emisiones. Dentro de este sector, se emiten 446.3 millones de toneladas de CO2e derivadas de la quema de combustible, y 131 mil 564 toneladas de carbono negro, un contaminante de vida corta con fuertes efectos nocivos sobre la salud de los seres vivos.

México actualiza y mejora constantemente sus inventarios, los cuales están cada vez más completos y tienen un mayor nivel de detalle, con datos que son comparados con fuentes y metodologías internacionales. Sin embargo, además de los instrumentos nacionales para la información sobre cambio climático, existen otras herramientas, plataformas y fuentes de datos internacionales que México puede aprovechar, pues contribuirían no sólo a mantener actualizada su información acerca de las emisiones del País, sino también a visualizar los sectores que más emiten GEI, a comparar el avance de diferentes países, e incluso a hacer estimaciones para encontrar las mejores soluciones para reducir emisiones, de acuerdo con la experiencia de otros países. A continuación, se abordan en lo general algunas de ellas.

El Explorador de Datos Climáticos (CAIT)

El Explorador de Datos Climáticos (CAIT) del Instituto de Recursos Mundiales (WRI, por sus siglas en inglés), permite observar emisiones globales por país y sector, y su evolución en el tiempo dentro de un periodo de 162 años. Además, proporciona herramientas que permiten evaluar otros elementos como las políticas de cambio climático de cada país, incluyendo sus Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional (NDC, por sus siglas en inglés) en materia de mitigación, y los puentes que pueden construirse entre éstas y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).

El CAIT pone especial énfasis en las emisiones de los 10 mayores emisores, pues de acuerdo a su metodología, en conjunto estos países contribuyen con cerca del 73 por ciento de las emisiones totales globales. Esta herramienta coloca a México como el décimo país que más emisiones genera a nivel mundial. Al comparar las emisiones y los sectores de los otros países, México podría colaborar y generar coaliciones con los otros nueve grandes emisores, para encontrar estrategias en conjunto, incluso sectoriales, y tener un mayor impacto en la reducción de emisiones a nivel global.

El Protocolo GEI (GHG PROTOCOL)

El Protocolo GEI del World Business Council for Sustainable Development y WRI proporciona estándares de contabilidad y herramientas de cálculo para empresas y gobiernos. Establece un marco global y estandarizado para medir y gestionar las emisiones de las operaciones del sector público y privado, incluyendo cadenas de valor, productos, ciudades y políticas. Este protocolo está contemplado dentro del sistema de mejora del INEGyCEI, que desarrolla el Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático (INECC) para integrar mejores prácticas y estándares internacionales en la gestión de la calidad de los inventarios.

El Simulador de Políticas de Energía y Cambio Climático (Energy Policy Simulator, EPS)

El EPS es un modelo abierto y gratuito, creado por Energy Innovation LLC y adaptado para México por WRI, que permite estimar los efectos de diferentes políticas relacionadas con el uso de energía y las emisiones en diferentes sectores de la economía. Tiene una amplia gama de opciones de política para mitigar las emisiones de GEI, contemplando costos, potencial de mitigación y sinergias.

El modelo tiene requerimientos importantes de datos y fuentes, que pueden ser fácilmente cubiertos por la amplia gama de información con la que cuenta México (que actualiza periódicamente), abriendo la posibilidad de reajustar rutas y políticas conforme se recopilan nuevos datos.

México puede aprovechar esta herramienta para desarrollar planes y estrategias, así como rutas de implementación. También puede evaluar potenciales sinergias entre la acción climática, el crecimiento económico y el desarrollo sostenible, pues el EPS proporciona información sobre la interacción entre diferentes políticas.

Un ejemplo del uso de esta herramienta es el reporte recientemente publicado por WRI México: Eligiendo el Camino Correcto. Opciones de bajo costo para fortalecer las metas climáticas de México logrando beneficios sociales a largo plazo, en el que, mediante el uso del EPS, se identifican 21 estrategias de política pública con las que México podría lograr, a bajo costo y con cobeneficios sociales, especialmente en el sector salud, su NDC condicionada.

México cuenta con un sistema de recopilación y procesamiento de información muy completo, pero existe una gran área de oportunidad para que los datos subnacionales del País sean tan completos como los nacionales. Esto permitiría implementar políticas y acciones locales de mitigación y adaptación de acuerdo con los impactos en las diferentes regiones del País.

También es importante alinearse con recomendaciones internacionales derivadas de experiencias previas y guías de mejores prácticas. Apoyándose en la experiencia y las lecciones aprendidas de organizaciones y naciones, México puede aprovechar todas estas herramientas, que cuentan con reconocimiento y validaciones internacionales, para mejorar la calidad de sus datos, encontrar sinergias, y opciones costo efectivas y eficientes para la acción climática.

Toda la información que se ha generado y se generará debe usarse no sólo para cumplir con compromisos internacionales, sino también para tomar mejores decisiones al interior, establecer objetivos climáticos más ambiciosos y completos, y diseñar mejores programas y políticas en beneficio de las personas, la economía y la biodiversidad de México.

Alinearse con una trayectoria de desarrollo baja en emisiones de carbono está en el mejor interés de México, ya que su población, economía y ecosistemas podrían verse gravemente afectados por un aumento de temperatura por encima de los 2°C. Además, numerosos estudios han señalado cómo los eventos climáticos extremos y la pérdida de servicios ecosistémicos (parte de los muchos efectos negativos del cambio climático) tienen un mayor impacto en grupos de bajos ingresos, lo que aumenta la desigualdad y empeora las condiciones de las personas vulnerables.

Documentos y herramientas

  1. Sexta Comunicación Nacional sobre Cambio Climático
  2. Inventario Nacional de Emisiones de Gases y Compuestos de Efecto Invernadero
  3. Explorador de Datos Climáticos (CAIT)
  4. Protocolo GEI
  5. Simulador de Políticas de Energía y Cambio Climático (Energy Policy Simulator, EPS)
  6. Versión de EPS para México
  7. Eligiendo el Camino Correcto. Opciones de bajo costo para fortalecer las metas climáticas de México logrando beneficios sociales a largo plazo